18/08/08
Si ayer el AVE marcó el día, hoy ha sido Gaudí el denominador común. Para empezar, desayuno en el Passeig de Gracia y rumbo a la casa Batlló, pasando antes por la casa Ametller. Y en la casa Batlló el redescubrimiento de un genio. En todo momento daba la sensación de estar dentro del mar, rodeado de luz, agua y animales marino.s Y dentro de la gran obra de un genio. Maravilloso. Desde ahí, a la Pedrera, con sus chimeneas y balcones tan famosos. aunque después de la casa Batlló, me esperaba algo más del edificio. Continuamos nuestra ruta Gaudiniana por la Diagonal en busca de la Sagrada Familia y de un sitio para comer. Antes de casi desfallecer, el hambre nos dejó ver Les Punxes y sus originales torres. Después del fabuloso abituallamiento, La Sagrada Clavada, digo... Familia. 8€ entrada, 4€ audioguía, 2,5€ ascensor. Y, excepto las vistas desde arriba, lo mejor está aún en las fachadas. Cuando termine será un templo majestuoso, lleno de luz, naturaleza y religión, como señas de Gaudí. Pero ahora mismo el interior decepciona. el siguiente capítulo era el Park Güell, pero debido a las horas y al cansancio, lo hemos dejado mejor para otro día. Así que después de la cena (coronada con una riquísima crema catalana) ya estamos en el hotel para, hoy sí, cargar correctamente todas las pilas.
SF
26.9.08
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